miércoles, 1 de octubre de 2008

Ata2



Ni se puede controlar, ni si quiera sugerirle otra forma de funcionamiento, de existencia, ¿porque no destruir todo artefacto que pueda prolongar su existencia? , o al menos exceptuarla de la mente.

Sujeta la respuesta también a ella, un sentimiento impotente se refleja en la expresión de los dedos, en el humor de los ojos, se forma, se deleita esta pelota de color poco definible, poco agradable, simplemente sensible, en la mitad del pecho, inunda pulmones, presiona, la psicosis ahoga. Recuerda, solo eres polvo de estrellas, atado a este invento, a este tiempo.

Queda esperar el sonido constante del péndulo, de un lado... para otro... no tiene prisa, pasara de un número a otro, de otro a otro, y el número esperado, llegará y pasará a otro, escéptico al infinito. Siempre atados a este invento, a este tiempo.

Esto es antes de lo que será, que lo que será ya es, que lo que es, es antes de lo que será esto que es, y ¿qué es? , lo que deberá ser; sea que es, que será, que fué, que permanece en tierra, oculto esta esperando su momento. Siempre atado a este invento.

No pretende ser un grito, no pretende ser la queja , no pretende ser, por que lo que pretendía ya es, por que dispuesto esta, en medio de la maleza, permanece, intangible, engañosamente invisible, no se destruye, no se altera, solo subsiste, entre olores, de los que somos, los que nacimos, los que seremos. Atados.

Resignación no es, sería una tierra sin tiempo, sin ser. Pero la duda subsiste, ¿quién podrá modificarlo, dañarlo, destruirlo, alterarlo? Sólo aquel, que viva en un mundo sin tiempo, que no necesite de el, que siempre sea el que es, que no cambie, que para el si exista la eternidad.

Todo tiene su tiempo, y todo lo que se quiere bajo el sol tiene su hora y Dios restaurará lo que paso (...)

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